Arquitectura:
El legado de la arquitectura egipcia se consolida a lo
largo de los siglos, basado en una serie de características propias: su colosal
ismo constructivo, su perfección técnica, y su capacidad de movilización
social para la realización de grandes obras. Cuenta
además cuenta con algunos elementos formales igualmente singulares. Así, su estructura
arquitrabada, la utilización frecuente de muros en talud, el
aprovechamiento de la piedra como material constructivo a pesar de las
dificultades de su extracción en aquel país de desierto, así como un modelo de
sostén basado en grandes columnas rematadas en capiteles característicos:
lotiformes, palmiformes o papiriformes, según su parentesco con
las plantas que se reproducen talladas sobre la piedra.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgJxhEzkjWKNU3Fzgxrtq18Y7ynH96jnT0v4ODVjEhk-wbrlBkko6oChkaU5PL2JkxefPaqgp2forHxFnXqonOKBBG89qgsBme3siOvT6uxUjT10ANIjLOYHRcraAx3FUi5BLpXT3KtXMQ/s1600/aaaaa.png)
Por otra parte, los egipcios desarrollaron, debido a su
actividad agraria, las técnicas de la agrimensura. Ello les familiarizó con la
geometría y el cálculo aritmético, conocimientos que aplicaron a la totalidad
de su arquitectura, otorgándole así unas proporciones precisas adaptadas a
determinados módulos.
Arquitectura funeraria
La arquitectura funeraria es sin duda una de las expresiones
más espectaculares de todo el arte egipcio, pero no hubiera sido posible sin el
desarrollo profundo de una religión que le daba una importancia absolutamente
trascendental.
Es el inmenso poder económico y social acaparado
precisamente por el faraón el que permitiría obras descomunales dedicadas a su
descanso eterno: Primero las mastabas, que luego se convirtieron en pirámides,
y posteriormente los hipogeos. La
primera forma arquitectónica con una finalidad de mausoleo fueron las mastabas.
Estaban formadas por una base tronco-piramidal con muros en talud, que
quedaban enterradas y mimetizadas en el paisaje. Las primeras se realizaron en
ladrillo, sustituido posteriormente por sillares de piedra perfectamente
escuadrados.
La pirámide es, por excelencia, la tumba del soberano,
de ahí que se revista de un simbolismo especial. En primer lugar, se ha
demostrado que algunas fueron concebidas bajo simbolismos numéricos, como es el
caso de la de keops, que recoge ciertas medidas astronómicas. De hecho cada
lado está perfectamente orientado a cada uno de los cuatro puntos cardinales, y
además, las cuatro aristas que provienen del vértice, simbolizan los rayos del
dios Sol-Rah, protegiendo a su hijo el faraón. Por otro lado, su forma apuntada
y su gran elevación las hacía visibles desde lejos, lo que también constituía
un símbolo grandilocuente del poder político, capaz de sufragar semejantes
obras
El último ejemplo de construcción funeraria, el hipogeo,
se desarrolló durante el Imperio Nuevo, tratándose de una construcción que
como su propio nombre indica, estaba excavada dentro de una montaña, con una
disposición interna que trasponía en cierto modo las estancias de las
anteriores construcciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario