lunes, 11 de agosto de 2014

Mesopotamia



Mesopotamia que significa “Tierra entre ríos”, es una gran depresión que se encuentra al norte del golfo Pérsico y esta regada por los ríos Tigris y Éufrates, Se divide en dos zonas bien diferenciadas desde el punto de vista geográfico: Lazona norte, llamada Asiria o Alta Mesopotamia, es una zona esteparia donde predominas los cultivos de secano.                                                                                                                                                                                                         La zona sur, donde se encuentra la región de Caldea o Baja Mesopotamia, es una región muy seca donde solo es posible la agricultura con sistemas de riego como, por ejemplo, los canales. 

Arquitectura
Templos y palacios van a ser las construcciones monumentales que ca­racterizan la arquitectura mesopotámica desde sus primeros tiempos.
Considerando la importancia que adquiere el elemento religioso como fundamento de la cohesión social de esta civilización, y su implicación con el poder político, no es de extrañar que las primeras edificaciones monumentales se refieran a estos dos ámbitos. Como por otra parte, ya se ha comentado que la expresión artística tiene una clara intención pro­pagandística, es una consecuencia lógica que la arquitectura adquiera un carácter colosal y de apariencia grandiosa, con el que exteriorizar de cara al pueblo el poder atesorado por la clase dirigente y la importancia de la religión.
Resultarían por tanto especialmente espectaculares en el entorno cultu­ral del momento las construcciones palaciegas, existentes desde los pri­meros tiempos, pero aún mucho más los templos, sobre todo los zigurats, auténticas montañas artificiales en medio del paisaje, capaces de sobre­coger el ánimo de cualquiera.
En cuanto a la arquitectura funeraria, no adquiere la importancia que alcanza en otras civilizaciones, como en la egipcia, por ejemplo, aunque en época del Imperio persa, las tumbas de sus reyes también logran un cierto protagonismo arquitectónico





Templos y palacios
Para la construcción de la casa de los dioses o la morada de los soberanos, en una zona donde la piedra escasea, se utilizó un nuevo tipo de ma­terial, el ladrillo, superando de este modo las di­ficultades técnicas que la construcción con gran­des piedras implicaba, tal y como ocurrió en la arquitectura megalítica.
El tipo de ladrillo más utilizado era el crudo o sin cocer (adobe); el auténtico ladrillo cocido so­lía emplearse en el revestimiento exterior de los edificios, más expuesto al deterioro por las incle­mencias climáticas; para su unión, en ocasiones, se hacía uso del betún. Los elementos construc­tivos estaban compuestos por gruesos muros de carga dispuestos en talud, y un sistema preferen­temente adintelado y de cubiertas planas. Sólo excepcionalmente se emplea el arco de medio punto y bóvedas como cubiertas.
Los templos, ya en época de los sumerios son denominados con el nombre de eanna, que sig­nifica “casa del cielo”. Su importancia simbólica y constructiva es pareja a la relevancia social del poder religioso.




Podemos distinguir dos tipos de templos: aquellos que están trazados con una planta rectangular, y rodeados de murallas con un sentido de ciudadela militar, en cuyo centro se edifica el templo propiamente dicho; y una segunda tipología característica, conocida como templo-torre, denominado Zigurat, construcción compuesta por varias terrazas superpuestas en cuya cima se eleva un templo.
Dichos zigurats, construidos como torres escalonadas, se construyeron con una determinada simbología que los configuraba como una escala luminosa entre el cielo y la tierra. Por eso se recubrieron exteriormente de cerámica vi­driada de distintos colores según cada una de las terrazas, que proporcionaba una luminosidad brillante cargada de reflejos. Desde lejos, esta imagen lumi­nosa resultaría espectacular y para muchos habitantes de la zona, realmente sobrenatural. Es posible que los siete pisos con sus distintos colores, pudieran simbolizar los siete dioses o siete planetas conocidos, con su significado, pues, de carácter cósmico.







                                                                                                                                                                                            

No hay comentarios:

Publicar un comentario